Una escritora que desconocía y que me encantó, así que seguro pasa a mi lista de deseos.
Lou Clark sabe muchas cosas. Sabe cuántos pasos hay entre la parada del autobús y su casa. Sabe que le gusta trabajar en el café Buttered Bun y sabe que quizá no quiera a su novio Patrick.las que la mantienen en su sano juicio.
Lo que Lou no sabe es que está a punto de perder su trabajo o que son sus pequeñas rutinas
Will Traynor sabe que un accidente de moto se llevó sus ganas de vivir. Sabe que ahora todo le parece insignificante y triste y sabe exactamente cómo va a solucionarlo.Lo que Will no sabe es que Lou está a punto de irrumpir en su mundo con una explosión de color.
Y ninguno de los dos sabe que va a cambiar al otro para siempre.
Con esa contratapa ya cautivó mi curiosidad pero fue comenzar a leer y ya no poder parar.
¡Excelente! Con un estilo ágil, ameno, sencillo, la escritora nos va planteando cuestiones fundamentales y profundas. Nos hace reflexionar sobre las decisiones que tomamos y los planteos que nos hacemos a nosotros mismos y a los demás. Y va mostrando las razones y los porqués de esas decisiones.
Está promocionada como romántica, pero para mí va más como sentimental, y sin duda, habla de AMOR, pero así, con mayúsculas. Una novela de aprendizaje y crecimiento personal. De valoración de la vida.
Las situaciones y los personajes encajan a la perfección y son los vehículos precisos para plantear temas duros y profundos respecto del sentido y la dignidad de la vida. Y no deja de interpelarnos, ¿Qué haríamos nosotros? Sin golpes bajos, sin cursilería o lugares comunes, inteligente y emotiva.
Solo me incomodaba leer con un nudo en la garganta y que las letras se difuminaran, pero el problema estaba en la humedad de mis ojos ;)
Recomendadísima. Y ya lo dije, buscaré las otras novelas de esta escritora que me agradó tanto.
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